Boda de Àlvaro y Pilar
Al llegar a la masia Puigventos, nos recibe Álvaro, nos saludamos, y concretamos los últimos detalles del “timing” , a pesar de que el pronóstico del tiempo dice que va a llover de momento se aguanta, tomamos un café y comenzamos, venga, vamos alternando de una estancia a otra, en una está Álvaro y en la otra Pilar, dos amantes de la naturaleza que se conocieron atados a una cuerda, son escaladores.
Una vez finalizados los arreglos, los familiares y amigos ya van tomando asiento en el jardín donde tendrá lugar la ceremonia, el sol también quiere participar, y se deja ver de vez en cuando a través del plomizo cielo.
Todo transcurre con calma, las emociones y miradas se suceden una tras otra, tras el sí quiero el alboroto y las felicitaciones hacen acto de presencia, abrazo y pompas de jabón los envuelven en un vaivén, todo es alegría.
Mientras los invitados se dirigen para hacer el aperitivo, aprovechamos para hacer unas fotos de pareja, el entorno que nos ofrece el
Alt Bergueda es magnífico.
No tardan en caer las primeras gotas de lluvia, bueno, lo exterior ya está, el resto se hará en interior, el tiempo manda.
Tras el aperitivo y la comida, un audiovisual hará salir más de una lágrima, después comenzarán una serie de juegos para amenizar la tarde, que continuará con baile has ve a saber qué hora término .